Anónima
Hoy contare mi historia, lo que he pasado y lo que me ha formado para ser lo que soy ahora.
Vengo de padres poco afectivos, ausentes y estrictos, trabajo desde muy pequeña y a la edad de 6 años fui abusada por un vecino; mis padres nunca se enteraron, siquiera lo sospecharon. A la edad de 10 años, volví a ver a mi violentador ya con una idea clara de lo que era un abuso, sentí repudio y molestia al ver que mi mamá me exigía que le saludara.
Inicié mi vida sexual a los 15 años, me sentía alguien poco valorada, sin afecto ni comprensión. Empecé a ver mi cuerpo como lo único que tenía para recibir atención. Estuve con varias personas, la mayoría mucho mayores que yo y a la edad de 17 años quedé embarazada de mi hijo, quise abortar, pero al final no lo hice pues sabía que la única responsable de las consecuencias era yo. De manera que decido llevar una relación formal con el papá de mi hijo que fue un fracaso total, mi carencia afectiva me empujaba a permitir malos tratos psicológicos, ya que él se había convertido en la única persona que "me amaba"; las cosas fueron yendo cada vez peor cuando conocí a mi segunda pareja, quien se convirtió en mi nuevo protector y decidí terminar la relación que tenía e iniciar esta nueva relación, siempre cargando con vacíos, inestabilidad e inseguridad.
Quedo embarazada de mi segundo hijo, esta vez una niña y, hasta en ese momento pensé que todo iría bien, súper pareja y súper papá. Un día que me entero me fue infiel, y se derrumbó la imagen que tenía de él por lo que decidí terminar la relación y continuar sola. Fue entonces cuando conocí a persona asiática, que por un tiempo fue mi pareja y quien suplía mis necesidades.
Dentro de todo este desorden, yo cursaba mi carrera universitaria, carrera que nunca me gustó, la escogí por satisfacer a mi papá, por compensar el hecho de haberle "fallado" al quedar embarazada y en esos 6 años llevé una vida descontrolada de encuentros con tipos fuera de mis relaciones.
Mi carencia de afecto no me permitía aceptar estar sola; yo necesitaba estar con alguien, buscaba aprobación, hasta que conocí a mi actual pareja, con el quise seguir el mismo guión, pero fue un gran apoyo, me instó a buscar ayuda, me mostró mi valor como mujer y como persona, entendí que no estaba bien, que tenía muchos problemas psicológicos, trastornos y traumas que venía
arrastrando que no me dejaban avanzar; me di cuenta que mi cuerpo era algo a lo que le daba valor monetario por la hipersexualización que había desarrollado luego de mi abuso.
Seguí con mi pareja actual y llevamos una relación sana, con comunicación activa, me motivó a estudiar lo que me gusta, ya que la carrera anterior nunca la pude terminar. A la fecha estoy a 3 trimestre de terminar mi carrera de psicología.
Puedo decirte con seguridad que actualmente me siento alguien con valor, no necesito estar con alguien, disfruto de mi soledad, amo a mis hijos, aunque sé que no llegaron en el mejor momento, ellos me ayudan a ser mejor cada día y a no repetir patrones para que ellos no se sientan en algún momento como me sentí yo.
Amémonos, aceptémonos, luchemos por lo que queremos, alcemos nuestra vos ante algún tipo de violencia. Los procesos son importantes para formarte, no todos pasamos por los mismos procesos, unos son más difíciles que otros, pero cada quien lleva su lucha, y es lindo ver donde estas voltear y ver todo lo que has superado.
Las situaciones difíciles te hunden, pero cuando tocas fondo lo único que queda es buscar hacia arriba para salir. Te confieso que aún me afecta un poco contar mi historia ya que me siento un poco avergonzada, pero sé que le ayudará a alguien a tomar lucha por lo que cree estar perdida, busca ayuda profesional si sientes no poder sola.
Escritora: Anónima
Editora: Sabrina Sutfin (lateoria_de_psicologia)